Tarta de queso a mi manera un "clásico"

 Esta receta de tarta de queso me acompaña desde que tengo 18  años, modificada en numerosas ocasiones, con lo que ya me es difícil saber que parte es original, y que parte es añadida. Eso mismo me ocurre con el nombre "Tarta de queso" sin más.

Durante muchos años, este era el único postre que mi familia y amigos esperaban cada vez que nos reuníamos en casa, y cualquier cambio en el menú era mal acogido, criticado, comparado, .... Con los años llegue a cogerle manía, y a pesar de las presiones para que lo realizará en cada evento, fiesta de cumpleaños, etc., me hacía la loca y a otro tema. Os voy a contar que la última ocasión con motivo de un cumpleaños hace unos meses en octubre, preparé una tarta Red Velvet cubierta con crema de queso. Bien, ya al final cuando tan sólo quedaban 2 raciones aproximadamente, alguno de los comensales con nostalgia recordó  la tarta de xxxxx, y los tiempos en los que yo la hacía.... Y nuevamente la cantinela, con lo buena que te sale, esta, referida a la Red Velvet, también está buena, pero la otra, .....vamos más de lo mismo. Como podéis imaginar en casa, lo clásico triunfa frente a las novedades.

Así que aburrida del asunto, a los pocos días, decidí, darles una sorpresa, una al año no hace daño, y prepararla. Así, que a continuación tenéis la receta no original

Ingredientes

Masa

100 g de galletas tipo Digestive
70 g de mantequilla
40 g de azúcar
1 cucharadita de canela o al gusto

Crema 
350 g de queso tipo Phidadelphia
190 g de nata liquída
140 g de azúcar
3 huevos
1 y 1/2 cucharadita de harina normal
1 limón en zumo
1 pellizco de sal

Preparación

1. Base de la tarta. Se trituran las galletas hasta formar una suave harina cualquier robot realiza esta función.
2. Se mezcla las galletas trituradas con la mantequilla fundida, el azúcar y la canela. En un  molde desmoldable preparado (*) se forra el fondo con la mezcla oprimiendo ligeramente con los dedos.
3. Crema. Se prepara la crema batiendo las yemas de los huevos con el azúcar, la sal, la harina y el queso. A mi me gusta hacerlo con las varillas.
4. A continuación se diluye la nata y el zumo de limón y se continua batiendo hasta que se obtiene una crema muy fina.
5. Por último se montan las claras a punto de nieve y se incorpora a la crema con una espátula.
6. Se vierte la crema en el molde y se introduce en el horno 45 minutos a 150 º
7. Dejar enfriar y desmoldar.

(*) Yo preparo el molde pincelando base y paredes y la base la forro con papel de horno. De esta forma  es más fácil de desmoldar.

Aunque es una tarta que siempre esta buena a mi me gusta que pasen unas horas desde que sale del horno para que el sabor del limón impregne la crema. Otro de los detalles importantes de esta tarta es el ligero sabor a canela de la base.

AgurtzaneS